La llama que enciende mis pasiones tiene sed. Sed de conversaciones intensas, pláticas interesantes, discusiones calurosas y cuestionamientos que me hagan pensar, ahondar más en los misterios de este mundo tan absurdo y esta vida tan valiosa y a la vez tan efímera.
No me beses con lujuria. Bésame con pasión, con respeto, con entrega. No olvides el
Cuando llore, no me tengas lástima, no seas condescendiente. No me digas qué hacer, ni que todo estará mejor. Ya sé que todo pasa. No quieras pensar por mí, ni sentir por mí. Cuando llore, abrázame. Acaríciame. Recuérdame que no estoy sola. Que tú también lloras. Que está bien llorar.Cuando me equivoque, no me humilles. Recuérdame que soy más que mis errores. Que no soy blanco o negro, que tengo en mí cientos de matices al igual que tú. No me digas que soy perfecta. No me subas a un pedestal porque me voy a caer. No me encierres en una jaula de oro. Veme por lo que soy. No lo que crees que soy o lo que quieres que sea.
Por último, ámame. Ámame como soy. Con mis miedos y mis pasiones. Con mi luz y mi oscuridad . Con mis días alegres y mis días de dolor, tristeza y amargura. Cree en mí. En mi capacidad de amarte. Siempre.
Y nunca olvides que juntxs seremos invencibles.
Texto extraído de: utterlydisclosed
Felicidades por el post. Me encanta y me siento identificada. Un saludo
ResponderEliminarLo amé quiero más! !
ResponderEliminar